El hidrógeno como alternativa a la energía renovable, y sus usos
El hidrógeno renovable se posiciona como uno de los principales vectores energéticos en el largo plazo debido a que su producción y consumo es neutral climáticamente y no genera emisiones contaminantes. Esto quiere decir, que el hidrógeno es uno de los materiales más abundantes en el planeta que resulta prácticamente inagotable y además, su consumo no afecta al medio ambiente y por ende, no afecta al cambio climático.
El hidrógeno tiene otra ventaja frente a otros vectores energéticos que conocemos, y es que tiene la capacidad de ser almacenado, como gas a presión o en estado líquido, lo que permite un mayor grado de gestionabilidad de este material.
Plan de la Unión Europea
Con el descubrimiento del hidrógeno como vector energético para generar energía limpia, la Unión Europea ha fijado como meta producir un millón de toneladas de hidrógeno verde para 2024. Para 2030, deberán ser 10 millones de toneladas al año. Es un crecimiento exponencial para la que, según desglosa la propia hoja de ruta europea, es la “opción más compatible con los objetivos de la Unión de neutralidad emisora y cero polución en el largo plazo”.
Ministerio de la Transición Ecológica
Por otro lado, el Ministerio de la Transición Ecológica afirma que:
El hidrógeno renovable es una solución sostenible clave para la descarbonización de la economía. El hidrógeno renovable es parte de la solución para lograr la neutralidad climática en 2050 y desarrollar cadenas de valor industriales innovadoras en España y en la UE, así como una economía verde de alto valor añadido.

Tipos de Hidrógeno
Cabe destacar que el hidrógeno no es una fuente de energía primaria sino un vector energético, esto es, un producto que requiere de una aportación de energía para ser obtenido y que cuenta con la particularidad de ser capaz de almacenar energía para, posteriormente, ser liberada de forma gradual cuando sea requerida.
Generalmente el hidrógeno es clasificado en tres tipos. Estos se dividen en función de la cantidad de materia prima necesaria y las emisiones de CO2 que son generadas en la producción de este.
Hidrógeno renovable o hidrógeno verde: este hidrógeno es generado a partir de electricidad renovable, utilizando como materia prima el agua, mediante un proceso de electrólisis. Así mismo, el hidrógeno obtenido mediante el reformado del biogás o la conversión bioquímica de la biomasa, siempre que se cumplan los requisitos de sostenibilidad establecidos, tendrá carácter renovable.
Hidrógeno gris: este hidrógeno es producido a partir de gas natural u otros hidrocarburos ligeros como metano o gases licuados de petróleo mediante procesos de reformado. Actualmente, el 99% del hidrógeno consumido en España es de este tipo.
Hidrógeno azul: este hidrógeno es obtenido de forma similar al hidrógeno gris, pero al que se le aplican técnicas de captura, uso y almacenamiento de carbono (CCUS: Carbon Capture, Utilization and Storage) lo que permite reducir hasta en un 95% las emisiones de CO2 generadas durante el proceso.
Aplicaciones del hidrógeno verde
Las aplicaciones del hidrógeno verde son muy amplias y variadas, puesto que el hidrógeno verde va a convertirse en un material clave para conseguir la descarbonización del planeta, y va a impactar en numerosos sectores e industrias. Veremos su utilización en:
- Sector de energías renovables (hidráulica, solar, eólica)
- Industrias del acero o alimenticias
- Industrias químicas (químicos base o fertilizantes verdes)
- Industrias petroquímicas
- Medios de transporte (trenes, vehículos, aviones y barcos)
Muchas compañías, sectores y entidades, están poniendo en el foco el hidrógeno como vector energético, para conseguir energía limpia. Ya sea por normativas futuras u otras razones, dentro de muy pocos años vamos a tener que utilizar otras fuentes de energía o materiales para generar energía, que no se agoten y que no resulten perjudiciales para el medio ambiente. Es por eso que, es importante que conozcamos otras alternativas a las fuentes de energía tradicionales, y que poco a poco vamos agotando., para saber en qué productos y materiales invertir, cuando llegue el momento.